Es, sin duda, una de las técnicas de comunicación más extendidas y efectivas que existen. Se trata de poner en boca de otras personas lo que nosotros queremos decir. No hay forma de generar más credibilidad en nuestro mensaje que dejar que otras personas de reconocido prestigio digan lo que quieres transmitir.

En el caso de las citas solemos hablar de personajes históricos o de la vida pública actual. Existen multitud de páginas web que recopilan este tipo de citas agrupadas por autor, época, temática, idioma, etc. En mi opinión, Wikiquote es la mejor. También es frecuente encontrarlas en Twitter (normalmente identificadas con #citas o #quotes). El reto será precisamente encontrar la cita adecuada para ilustrar la idea que se quiere transmitir.

Es importante que a la hora de elegir al autor de la cita lo hagamos pensando en nuestra audiencia. Pensemos en qué personaje puede aportar mayor credibilidad al mensaje. Por ejemplo, si vamos a realizar una presentación a un público de perfil tecnológico o emprendedor, citar a Steve Jobs puede ser una gran idea. Si el público es de perfil académico, citar a un gran filósofo de la antigüedad o a un premio Nobel también puede ayudarnos a conseguir nuestro objetivo.

En el caso de los testimonios, el enfoque es un poco distinto. No se trata tanto de utilizar frases o aseveraciones de grandes personajes públicos como de encontrar la persona adecuada. A veces, de cara a una reunión interna, utilizar una afirmación del presidente de nuestra empresa puede ser la clave. En otras ocasiones, plasmar la declaración de un cliente satisfecho puede ayudarnos a avanzar en una relación comercial. Y en muchas otras, un testimonio de un líder de opinión puede acabar convenciendo a un potencial inversor. En todos los casos, la filosofía sigue siendo la misma: que otros digan lo que nosotros queremos decir. Así se consigue un plus de credibilidad.

Para terminar, una recomendación. Es fundamental asegurarse de que la cita o el testimonio que utilicemos es cierto y que se atribuye a la persona correcta. Si buscamos credibilidad para nuestro mensaje, no podemos permitirnos errores en este punto.